Un lenguaje positivo puede transformar tu vida, este transforma no solo la relación que tienes contigo mismo, si no las relaciones que con los demás y te aseguro que además veras el mundo de una manera distinta.
Hablarnos a nosotros mismos y a los demás de manera positiva puede cambiar tu estado de animo y dirigirte hacia la felicidad.
Vivir quejándonos y criticando todo lo que nos incomoda hace que toda nuestra energía se concentre en lo que no nos gusta.
Utilizando un lenguaje positivo hace que tu mente, tu energía, tu sistema responda de forma diferente,si nuestros pensamientos son ricos y afirmativos, nuestras probabilidades de llevar una vida feliz se incrementarán.
Las palabras tienen poder. Son capaces de lograr un efecto inmediato en nuestro estado de ánimo e incluso quedarse instaladas en nuestro sistema hasta de manera inconsciente.
Y ya se que piensas, Mariana se escucha bonito pero como cambio mis pensamientos. Al principio no es sencillo, tienes que entrenar a tu mente y encontrar un balance entre tu inconsciente y tu consciente.
Aquí te dejo unos tips:
- Toma conciencia de tu lenguaje actual.
- Regula tu lenguaje mediante el entrenamiento.
- Consolida el hábito de hablar en positivo.
Escribe una lista de 15 palabras que te motiven en tu día a día, ahora dilas en voz alta y escríbelas y ponlas en un lugar visible.
Es importante que estes consciente de las emociones que sientes al hablar en positivo, para que vayas adecuando esas palabras cada vez que necesites sentirte mejor.
Utilizar un lenguaje positivo saca lo mejor de ti.
Entrenar e incorporar en tu rutina un lenguaje positivo afectará directamente tu forma de ver y construir tu mundo.
¡Intentalo!